Cuando Dani tenía alrededor de 6 meses, empecé a emocionarme con la idea de empezar a darle comida complementaria, ya sabéis que con el primero, todo hace especial ilusión y yo estaba deseando comenzar con esta nueva etapa porque además, él mostraba mucho interés por la comida cuando lo sentábamos con nosotros a la mesa.
Leí todo lo que cayó en mis manos en aquella época para ver cómo comenzar a introducirle las comidas y hablé con su pediatra. Dani era un tragón absoluto, así que tampoco fue especialmente difícil; comenzamos con las papillas y purés dulces y luego los salados (en aquella época se empezaba así).
Y una de las cosas que me vinieron genial cuando salíamos de viaje o para merendar en el parque fueron los tarritos, de verdad que para mí fueron una salvación porque con mis guardias y turnos, no me daba la vida para hacer más purés de la cuenta, congelarlos y tenerlos disponibles para dárselos; así que le hacíamos en casa sus papillas al vapor, y cuando salíamos fuera, llevábamos nuestros tarritos de alimentación infantil. Incluso en casa los hemos usado más de una vez porque realmente es mucho más cómodo, y teniendo tres niños pequeños, la verdad es que fueron una ayuda para organizarme la mayoría de las veces.
Evidentemente queremos lo mejor para nuestros hijos, así que lo más importante es fijarse en que los alimentos que compramos para nuestros hijos sean de calidad y de una marca reconocida que nos ofrece todas las garantías y transparencia.
Yo creo que la primera marca que le compré fue Hero, no había tanta variedad como ahora para elegir, y era la que mejor se comía con diferencia.
Una forma más de alimentar a nuestros peques
Los tarritos de Hero Baby son perfectos para introducir la carne, el pescado, las frutas y la verdura los peques de manera 100% natural, porque se cocinan con los mejores ingredientes de la huerta y se cierran al vacío para que se siempre tengan la mejor calidad sin la necesidad de usar conservantes ni colorantes.
Todos los ingredientes que se utilizan para la elaboración de los tarritos infantiles Hero están especialmente seleccionados y cultivados para alimentación infantil, y además, se lleva un control exhaustivo desde la plantación hasta la conservación final, paso a paso, hasta llegar al supermercado.
Controles de seguridad alimentaria
Todos los alimentos infantiles Hero llevan un alto control de seguridad alimentaria, para cumplir con la exigente normativa y asegurar la mejor alimentación para los más peques de la casa. Los ingredientes se lavan, trituran y cuecen manteniendo todas sus propiedades. Al finalizar, se cierran con vapor a alta presión. Se meten en una especie de olla exprés gigante, donde se hace un baño maría a temperaturas superiores a 100º, así se consigue destruir cualquier microorganismo y el producto se conserva de una manera 100% natural.
La conservación es la clave
Es importante destacar que los tarritos de Hero baby no tienen conservantes ni colorantes; algo que para nosotras como madres es muy importante, os invito a que leáis las etiquetas de los productos, de ese modo podréis comprobar que llevan los mismos ingredientes que usamos en casa. Ni más ni menos.
¿Usáis tarritos infantiles en casa con vuestros hijos? ¿Os fijáis en las etiquetas al comprar los alimentos de vuestros bebés?
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