Mi Lámina Pata de Pirata para el Día del Padre

Escrito por Lou el Abr 11, 2013 | Sin comentarios

Como os prometí, yo también encargué una lámina de las que sorteamos con Pata de Pirata, desde que las vi por primera vez me encantaron y no pensaba dejar pasar la oportunidad de hacer un regalo distinto y original para el Día del Padre; a mi marido le encantó, la tiene colgada en su pared del despacho, al lado de su mesa y os aseguro que todos los clientes preguntan por ella cuando entran, es que llama la atención por sí sola 🙂 es un cuadro de familia… sin serlo 😀 Me parece un regalo chulísimo para un Cumpleaños, para Navidad, o para el Día de la Madre, que está al caer. Y si estáis pensando en hacer algún regalo para alguna Comunión o incluso los recordatorios, son preciosos y distintos a todo lo que habéis visto, podéis verlo aquí. Os voy a enseñar cómo me llegó todo para que veáis lo cuidados que son con cada detalle ¡es que me encanta! y además rapidísimos, tardé yo más en buscar las fotos que ellos en retocarlas, montarlas y mandarme la lámina 🙂 ¡Súper-contenta con mi compra! El mecanismo es muy sencillo, sólo hay que mandarles las fotos que queremos usar, ellos nos mandan un mail con indicaciones sobre las fotos que debemos mandar para que las láminas queden bien, y ellos se encargan de retocarlas para que queden perfectas; la foto que les mandé de mi hijo mayor estaba totalmente a contraluz (imposible encontrar una en la que no estuviera haciendo el gamba) y quedó espectacular. Cuando tienen montado el primer boceto, nos lo mandan por mail para poder verlo y si queremos hacer algún cambio, se lo comunicamos y en nada lo tenemos hecho. Finalmente, en el plazo de 1 semana, más o menos, tenemos en casa nuestra lámina totalmente personalizada y a nuestro gusto. Me llegó en un portadocumentos cilíndrico perfecto para transportar, en ése mismo lo llevé a enmarcar, con su etiqueta monísima… me chiflan los packaging con detalles y bien elaborados. La lámina viene impresa en un papel de fotografía de buenísima calidad para que los colores perduren y la lámina se mantenga siempre en perfectas condiciones. La calidad de los colores en la impresión es una pasada y ellos mismos se encargaron de poner detallitos en cada uno de nosotros, incluso al mandarme el primer boceto, les pedí un cambio en mí misma y en un rato tenía un boceto nuevo ¡perfecto! Quedé encantada con el resultado y ya estamos planeando nuestra próxima lámina, que también os enseñaré ¡por supuesto! lo que tengo en mente va a ser una pasada y a quien irá...