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Impresionantes Galletas de Navidad con Chocolate y Aceite de Oliva
Dic20

Impresionantes Galletas de Navidad con Chocolate y Aceite de Oliva

    Impresionantes Galletas de Navidad con Chocolate y Aceite de Oliva Las galletas son algo que en Navidades hacemos un montón en casa, con tanto tiempo con los peques en casa, o hacemos algo todos los días o se me suben por la pared y en mi #PlanVidaSaludable no entra bajar niños de las paredes 😉 Este año tenía pendiente esta receta buenísima de Nigella Lawson, aunque ella las hace con mantequilla y yo la he cambiado por el aceite de oliva de Carbonell que usamos siempre en casa; un acierto, porque han quedado crujientes por fuera y abizcochadas por dentro, muy parecidas a las Riquísimas galletas blanco y negro y a las Galletas de chocolate con almendra, pero con un intenso sabor a chocolate que estoy segura os va a encantar. Siempre suelo hacer yo las recetas primero y luego, si sale bien, las hago con ellos; porque más de una vez nos hemos llevado alguna sorpresa haciendo alguna receta, y si luego no les sale se arma un guirigay… así que ahora que ya las he hecho, estas fiestas las repetiremos un montón de veces, les va a encantar participar… y comérselas… claro 😀 Os dejo la receta y ya me contaréis.   ¿Qué necesitamos para hacer las Galletas?   100 g de Aceite de Oliva Carbonell 125 g de chocolate negro fondant 75 g de azúcar moreno 45 g de azúcar blanco Una cucharadita de aroma de vainilla (si tenéis en pasta mejor) 1 huevo grande 165 g de harina de trigo 30 g de cacao en polvo sin azúcar 1 cucharadita de bicarbonato sódico Media cucharadita de sal 80 g de chocolate en trocitos   ¿Cómo las hacemos?   Ponemos papel de horno en la bandeja y precalentamos a 180º (no metáis aun la bandeja). Derretimos el chocolate (los 125 gramos) en el microondas y lo dejamos enfriar un poquito. En un bol ponemos la harina tamizada junto con el cacao, y añadimos el resto de ingredientes incluido el chocolate derretido y el chocolate en trocitos. Mezclamos hasta que quede todo bien integrado. Hacemos bolitas con la masa, intentando que sean todas del mismo tamaño (las mías pesaban unos 30 gramos cada una). Las disponemos encima del papel de horno en la bandeja, dejando un espacio entre las bolitas porque luego se expanden un poquito. Horneamos a 180º unos 15 minutos. Sacamos del horno, dejamos enfriar cinco minutos más en la bandeja y las pasamos a una rejilla hasta que terminen de enfriarse. ¿Alguien se atreve a comerse sólo una? Ni los restos de la harina han quedado en la cocina ¡qué cosa más...

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